El jueves 8 de septiembre la Asociación de Ciudades y Municipios de Eslovaquia (ZMOS) protestó frente a la oficina del Gobierno en Bratislava contra la reducción de los presupuestos locales y la falta de ayudas para hacer frente a la inflación y la actual crisis energética.
Los representantes de ZMOS afirman que el aumento de los precios de la energía limita o interrumpe muchos de los servicios que los municipios suelen brindar a los ciudadanos en los sectores de la cultura, el deporte, así como los servicios sociales y la seguridad. Además, subrayan el importante papel que jugaron los municipios durante la pandemia del Covid-19 y la crisis migratoria, así como las acciones realizadas para hacer frente a los desastres naturales.
Los alcaldes argumentan que el Gobierno debería escuchar más a los administradores locales, porque ellos son los que están más cerca de la gente y pueden brindar sugerencias útiles para enfrentar muchas situaciones de emergencia. El Estado, sin la importante contribución de las ciudades y municipios, no sería capaz de gestionar las crisis.
El presidente de ZMOS, Branislav Tréger, criticó el trabajo del Gobierno, que recortó alrededor de mil millones de euros de los presupuestos de los gobiernos locales con el llamado paquete «antiinflacionario», presentado por el ministro de Hacienda, Igor Matovič.
La cooperación entre el Estado y los municipios es «ineficaz», agregó Tréger, porque los pilares sobre los que debe descansar el funcionamiento de los gobiernos locales – estabilidad, previsibilidad y asociación – no se han alcanzado. Además, el Gobierno no tiene debidamente en cuenta el impacto de varias medidas económicas en los presupuestos locales.
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Foto: ZMOS (Fb)
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