Denuncian a Robert Fico por difamación del grupo étnico Rom

Un investigador de la Agencia Nacional contra el Crimen (NAKA) denunció al presidente del partido Smer-SD, Robert Fico, por las declaraciones emitidas en un video publicado en Facebook el pasado 6 de septiembre.
Fico defendió a Milan Mazurek, diputado del Partido Popular Nuestra Eslovaquia (ĽSNS) condenado por declaraciones racistas contra el pueblo romaní. Según él, «Mazurek dijo solo lo que piensa casi todo el país».

Fico dijo que respeta la sentencia de la Corte Suprema, pero expresó la duda de que se emitió bajo la presión de los medios y esto podría ayudar a aumentar las preferencias de los votantes para el partido de extrema derecha.
El investigador de la NAKA ha acusado al ex primer ministro de difamación de una raza, nación y creencia, incitación al odio nacional, racial y étnico, así como apoyo al crimen de forma pública. La pena en estos casos varía de uno a cinco años de prisión.

Los diputados de Smer-SD consideran las acusaciones hechas contra Fico como un ataque contra el partido y una forma de intimidación hacia los votantes. En una conferencia de prensa anunciaron la convocatoria del comité parlamentario de defensa y seguridad para pedir que el fiscal especial Dušan Kováčik y el presidente del Cuerpo nacional de policía Milan Lučanský expliquen el procedimiento iniciado contra Fico.
El primer ministro Peter Pellegrini se ha distanciado de las declaraciones de Fico, que considera inaceptables y «peligrosas» para cualquier político. El ministro de Economía, Peter Žiga, cree que las palabras del presidente de Smer dan la impresión de que él defenda el extremismo. «Una cosa es identificar algunos de los problemas que amenazan a las comunidades, y otra es defender a los extremistas y comentar el veredicto de la corte», dijo.
Los partidos de la coalición SNS y Most-Hid también comparten la posición de Žiga: Most-Hid, en un comunicado, espera que Fico se dé cuenta de que «la promoción del extremismo en cualquier forma es muy socialmente peligrosa». El ministro de Justicia, Gábor Gál (Most-Hid), dijo que el ex primer ministro “ha cruzado la línea roja»: en el siglo XXI no hay lugar para los fascistas y la retórica fascista.
Según el plenipotenciario del gobierno para las comunidades romaníes, Abel Ravasz (Most-Hid), la retórica anti-romaní es solo un instrumento de propaganda electoral.
El Viceprimer Ministro de Inversiones e Informatización, Richard Raši, trató en cambio de amortiguar la polémica, convencido de que las declaraciones del presidente de Smer fueron mal interpretadas.
Por su parte, Robert Fico escribió en Facebook que «siempre luchó contra el fascismo y el extremismo en nuestra sociedad» y define las acusaciones en su contra como un «teatro mediático».

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Foto: SMER – SD (Fb)
Milan Mazurek (Fb)
Jaroslav A. Polák (CC BY-NC-ND 2.0)

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