La cascada Rimsky Vodopád, situada en el parque inglés de la familia Andráši cerca de la villa Betliar, es accesible de nuevo después del trabajo de restauración.
Rimsky Vodopád es uno de los edificios más interesantes en el parque. Diseñado en el siglo XIX por el arquitecto Josef Bergmann, tiene el aspecto de una ruina de un antiguo acueducto romano.
En 1909 Karol Andrasi IV, hijo del último propietario de la villa, después de una cacería en Groenlandia y Noruega llevó consigo tres cachorros de osos y los puso en una piscina debajo de la cascada.
Betliar se convirtió, por tanto, en la primera zona de reproducción de osos polares en cautividad, no sólo en Europa sino en todo el mundo.
La cascada se encuentra en uno de los parques más grandes de Eslovaquia y seguramente se convertirá en una atracción turística para visitar el próximo verano.
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Foto: Roman Hanc, TASR
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