Según un análisis reciente elaborada por Finstat, en el año 2016 se establecieron en Eslovaquia 19.500 nuevas empresas, un 30% más que el año anterior.
Los principales sectores resultaron ser la venta al por menor, los servicios y la construcción. Una de cada seis empresas tiene propietarios extranjeros, procedentes principalmente de República Checa, Austria y Ucrania.
Esto es un cambio significativo en la economía eslovaca, después de dos años negativos. En 2013, en efecto, las nuevas sociedades habían sido 29.000.
Entre las razones de la disminución en el bienio 2014-2015, hay probablemente la introducción de una cuota mínima de la tasa de licencia de 480 euros al año, lo que llevó al cierre de empresas con pérdidas o con ganancias mínimas.
Tuvieron un impacto positivo la recuperación del crecimiento económico y los cambios legislativos aprobados recientemente, tales como la reducción de los impuestos sobre las personas jurídicas del 22% al 21% y la aprobación de la supresión de las licencias de impuestos programada a partir de 2018.
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Foto: Pixabay
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