El Ministerio de Hacienda presentó al Consejo Económico y Social el borrador definitivo del presupuesto de la administración pública para 2023-2025.
El presupuesto tuvo en cuenta la crisis energética y la alta inflación, las consecuencias de la pandemia y el conflicto ruso-ucraniano, así como las previsiones macroeconómicas elaboradas en septiembre de 2022.
El principal objetivo es la reducción de los impactos negativos de la actual situación de crisis, en particular la energética, que se traducirá en los mayores costes económicos.
El presupuesto también incluye un volumen extraordinario de gastos para una serie de medidas permanentes, como el aumento de los salarios de los docentes (hasta el 23,2%), otros funcionarios públicos (17,7%) y trabajadores de la salud, y el aumento de las pensiones (11,8%), así como el paquete de ayudas para familias con hijos por un importe de 1.100 millones de euros.
Se espera que el gasto en salud ascienda a 7.600 millones de euros, con un aumento del 19%, mientras que al sector de la educación se le deberían asignar recursos por un importe de 4.500 millones de euros, con un aumento del 12%. Para el sector defensa, se prevé una asignación del 2% del PIB. Sin embargo, el Ministerio de Hacienda advierte que las asignaciones para el sector salud no serán suficientes para cubrir el aumento de salarios y para evitar los menores ingresos de las aseguradoras de salud y los hospitales estatales.
También se prevén recursos extraordinarios por valor de 3.500 millones de euros para ayudar a las empresas, los ciudadanos y las instituciones públicas a hacer frente al fuerte aumento de los precios de la energía.
El Ministerio precisó que fue necesario encontrar un término medio entre la necesidad de recursos extraordinarios y un nivel sostenible de deuda pública, que ha crecido enormemente tras la pandemia, alcanzando el 62,2% del PIB en 2021. El próximo año, los analistas esperan que la deuda pública descienda al 58% del PIB.
Por primera vez, la propuesta también tiene en cuenta los riesgos principales en caso de que el presupuesto de la administración pública no sea aprobado. Actualmente, de hecho, el Gobierno no cuenta con el apoyo de la mayoría en el Parlamento. Un presupuesto provisional, advierte el Ministerio, amenazaría las funciones esenciales del Estado, por ejemplo en los sectores de la salud y la defensa, pondría en grave peligro la compensación adecuada ante los efectos negativos de las crisis actuales y la implementación de inversiones previstas por el Plan de Recuperación y Resiliencia, con un gasto de 2.300 millones de euros para 2023.
______________________
Foto: loufre CC0
Deja un comentario