La Galería Nacional Eslovaca (SNG) reabrirá su sede en Bratislava el 11 de diciembre tras una compleja renovación. Los interiores no estarán completamente equipados y amueblados con las exhibiciones, pero gradualmente los visitantes podrán acceder a las exposiciones permanentes, la sala de cine, la biblioteca moderna, la cafetería y la librería. Las últimas pequeñas obras se completarán durante el otoño.
La renovación de la Galería Nacional comenzó en 2016, con un coste total de más de 70 millones de euros. El ambicioso proyecto representa un hito histórico para la escena cultural y artística eslovaca e influirá significativamente en la planificación urbana del centro de Bratislava, con la creación de un espacio público completamente nuevo y un lugar animado para pasar el tiempo libre a orillas del Danubio, ha explicado Alexandra Kusá, directora general de SNG.
La reconstrucción cambió la orientación espacial de la galería y la reintegró a la estructura de la ciudad, con tres salas en la planta baja, una cafetería, un centro creativo y una biblioteca. Un acuerdo con la Academia de Bellas Artes permitirá unificar las bibliotecas y crear una gestión conjunta. Esta será la biblioteca de arte más grande de Eslovaquia, dijo Kusá, quien destacó la importancia de un enfoque más abierto y mayores oportunidades de socialización para las personas gracias a horarios de apertura extendidos.
Uno de los principios rectores en la renovación de la Galería ha sido la recuperación de algunos de los materiales originales. Por ejemplo, el «Jardín de travertino» toma su nombre de los bloques de travertino que originalmente formaban parte de las arcadas y que hoy se han transformado en bancos de jardín. El resto del travertino fue molido y utilizado para los pisos de algunas salas.
En la nueva sala de cine, el intradós y el revestimiento de las paredes también son elementos típicos de la arquitectura de los años setenta. En Bratislava se están llevando a cabo una serie de demoliciones de conjuntos arquitectónicos icónicos del régimen socialista (como Istropolis), pero Alexandra Kusá, especialista en arte de la época socialista, está convencida de que de los edificios de esa época también se pueden extraer elementos perfectos.
Un lugar particular de la Galería será el patio, con un nuevo piso que absorberá y hará evapora mejor el agua. Se convertirá en un espacio público con árboles y sillas inspiradas en las sillas verdes de los jardines parisinos de Luxemburgo y las Tullerías. Se decidió no utilizar los clásicos y muy incómodos bancos, sino sillas sencillas que los visitantes podrán mover a su antojo.
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Foto: Slovenská národná galéria
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