La «Nueva Ruta de la Seda» brinda una gran oportunidad a la terminal de Dunajská Streda

La semana pasada, en la terminal logística Metrand de Dunajská Strada (región de Trnava), llegó un primer tren de carga proveniente de la ciudad de Xian, en el centro de China.
El tren transportaba un convoy de carga con 44 contenedores cargados con diversos bienes de consumo, productos electrónicos, electrodomésticos y accesorios para automóviles. Recorrió más de 7.000 km en 14 días pasando por Kazajstán, Rusia y Ucrania. En la terminal de Dobrá (región de Košice), se realizó el traslado de los contenedores a la red de ancho estándar.
Según el ministro de Transporte, Arpád Érsek, un tren de carga podría llegar regularmente a Eslovaquia cada semana y esto reduciría el tráfico pesado en las carreteras eslovacas. Esta es una gran oportunidad de negocios para la red ferroviaria estatal, que en opinión de Érsek ofrece una ruta rápida y segura a través de Eslovaquia y podría utilizarse de manera más efectiva y eficiente.
Los bienes procedentes de China se destinan a los mercados de Eslovaquia, República Checa, Hungría y Austria. La terminal de Dunajská Streda opera 550 trenes de carga a la semana; las mercancias contenerizadas se distribuyen dentro del radio de unos 150 kilómetros.
La terminal de transbordo de Dobrá pertenece a la empresa estatal ZSSK CARGO y constituye un punto importante a lo largo de la ruta de tránsito. Desde 2010 gestiona los contenedores de 329 trenes provenientes de China con mercancias destinadas a países de la Unión Europea. Actualmente puede trasladar hasta 200.000 contenedores al año.
EN 2018, 105 trenes de carga llegaron a Eslovaquia desde China. Esto significa que el número de trenes se cuadruplicó, pero muy por debajo de las previsiones del Ministerio de Transporte que esperaba la llegada de 500 trenes. Este año el número se ha reducido aún más.
Por lo tanto, la llegada del convoy chino representa una nueva gran oportunidad para Eslovaquia. El transporte de contenedores de China a Europa está creciendo rápidamente y tiene un gran potencial para el futuro. Eslovaquia también podría aprovechar la capacidad insuficiente de las estaciones de transbordo polacas, actualmente utilizadas por los trenes chinos. La red ferroviaria eslovaca forma parte de siete corredores ferroviarios europeos principales. Los trenes de carga pueden viajar a velocidades de hasta 120 kilómetros por hora.