La tasa de criminalidad en Eslovaquia resulta ser la más baja en los últimos 10 años. En la primera mitad de 2018, según los datos estadísticos recabados por la policía, se registraron 33.000 delitos, mientras que en el semestre de enero a junio de 2009 la cifra superó los 54.000.
Las buenas noticias
El número de robos en hogares este año ha disminuido en casi un 66%: 464 casos en comparación con 1.118 en 2009. Cabe señalar que los robos en las viviendas son generalmente raros en Bratislava.
A fines de junio, los vehículos robados eran 728, mientras que hace 10 años la cifra era de 1.936. Muchos de ellos – los objetivos favoritos son los automóviles europeos y estadounidenses de alto nivel – se revenden en los países vecinos.
Incluso los delitos económicos han disminuido: 1.102 casos, con una disminución del 25% en los últimos diez años.
Las malas noticias
El número de casos de evasión fiscal en el país se ha triplicado en los últimos 10 años.
Con respecto a los delitos violentos, los datos parecen ser contradictorios: la tasa general de delitos ha disminuido en un 29% en los últimos diez años, pero el número de delitos cometidos en el bienio 2014-2015 fue menor que en el período actual.
En cambio, el numero de delitos violentos de carácter racista ha aumentado: 92 casos, lo que representa la segunda peor cifra después de 2011.
Además, este año hubo 323 casos de abuso sexual, la segunda peor cifra en la última década, después de 2014.
En los dos últimos casos, es probable que haya habido un aumento en las denuncias policiales debido a una mayor sensibilidad del problema por parte de las personas.
La mayoría de los informes de crímenes provienen del centro histórico de Bratislava y se refieren a pequeños robos y hurto callejero o actos de vandalismo en los vehículos. Las personas más frecuentemente atacadas son los turistas que no están familiarizados con el entorno local. Los carteristas están activos especialmente en verano y durante las vacaciones de Navidad. Prefieren lugares como centros comerciales, mercados, transporte público cerca del centro histórico, áreas cercanas a los principales hoteles y sitios turísticos, las dos estaciones de ferrocarril de Hlavná Stanica y Petržalka y los trenes nocturnos a Praga y Varsovia.
La lucha contra el crimen organizado
La policía está luchando activamente contra el tráfico ilícito de bienes y personas, la inmigración ilegal y las actividades ilegales de organizaciones delictivas que tienen intereses comerciales en el centro histórico de Bratislava y están involucradas en el tráfico de drogas, personas, cigarrillos y armas, el robo de automóviles, fraude financiero e informático, juegos de azar, prostitución, corrupción pública y extorsión.
Eslovaquia ha sido identificada como un país de tránsito de drogas ilegales de Turquía, los Balcanes, Asia y Afganistán, pero con muy pocos casos de violencia asociados con el tráfico de drogas. La policía ha progresado en la incautación de envíos de heroína, cocaína y marihuana.
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Foto: Polícia Slovenskej republiky (FB)
Pixabay CC0
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