El 28 de enero, el Consejo Nacional Eslovaco aprobó por unanimidad el proyecto de ley presentado por Patrick Linhart (Sme Rodina) que introduce el registro de alimentos estatal central y el primer «semáforo digital de alimentos».
El consumidor podrá evaluar el producto que está a punto de comprar mediante una aplicación móvil puesta a disposición por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural. De hecho, la información en las etiquetas de los productos alimenticios se transferirá en formato digital y se integrará con otra información contenida en el registro digital de alimentos.
Las ventajas
El propósito de la medida es pasar de la base de datos de productos de fabricantes individuales, mayoristas y cadenas minoristas a una base de datos común, que sea accesible para el consumidor medio. Con ello se pretende ayudar a los consumidores a orientarse en la compra de productos alimenticios y aumentar la competitividad de los productores eslovacos.
El semáforo de alimentos permitirá evaluar rápidamente si un producto es adecuado para el consumidor mediante la configuración de la aplicación. Por ejemplo, el consumidor puede indicar si es alérgico a determinados alimentos, si solo busca productos eslovacos, alimentos que no contengan OMG ni aditivos, y alimentos dietéticos con menos grasa, bajos en azúcar y sal.
Los agricultores y productores podrán registrar productos eslovacos de calidad de forma voluntaria en el sistema, gestionado por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural.
Linhart tiene la intención de extender el semáforo de alimentos a las instalaciones del comedor escolar y hospitales mediante otra enmienda a la Ley de Alimentos.
El sistema también permitirá prevenir el fraude alimentario y la publicidad engañosa: «hasta el 70% de los alimentos analizados no se corresponden con lo declarado en el paquete», subrayó Linhart durante el debate parlamentario.
Las críticas
El semáforo de alimentos ha sido criticado por la Cámara de Agricultura y Alimentación de Eslovaquia (PKS) como una «medida populista» que no resuelve los problemas reales de las empresas alimentarias de forma sistémica. Además, la redacción final de la ley se considera «ambigua y confusa», cuestionable también desde el punto de vista del cumplimiento de la legislación de la UE.
En cuanto a la supuesta ventaja de la «unificación de registros alimentarios», PKS advierte del riesgo de introducir una carga administrativa adicional para las empresas alimentarias. De hecho, la legislación eslovaca ya establece una serie de registros relacionados, por ejemplo, con nuevos alimentos, complementos alimenticios, aguas minerales y de manantial, especialidades tradicionales, indicaciones geográficas protegidas o el registro de viñedos, y cada uno de estos registros está gestionado por una autoridad statal diferente.
El establecimiento de un registro de alimentos no aumentará la transparencia y la seguridad alimentaria de Eslovaquia, dice la Cámara, ya que la ley europea ya impone una extensa gama de obligaciones en el suministro de información alimentaria y contra el fraude alimentario. Al mismo tiempo, ya existen aplicaciones que ofrecen datos nutricionales sobre alimentos o datos sobre el país de origen de alimentos y materias primas.
La Cámara también declara su oposición a la creación de criterios nacionales de evaluación de alimentos, ya que estos se están desarrollando actualmente a nivel de la Unión Europea.
_________
Foto: achirathep CC0
Deja un comentario