Volkswagen Slovakia celebra este año el 30 aniversario de la planta de Bratislava, fundada el 30 de mayo de 1991, con alrededor de 100 empleados. La producción comenzó en las instalaciones de la empresa Bratislavské Automobilové Závody (BAZ), que producía varios modelos de Škoda.
A lo largo de dos años, de 1992 a 1994, Volkswagen aceleró el ritmo de producción, pasando de los 15 vehículos iniciales al año a 100.000 coches de varias marcas del grupo, como Volkswagen Passat y Golf.
Con el CEO Jozef Uhrík, quien dirigió la empresa hasta 2005, Volkswagen Eslovaquia hizo una importante contribución a la transformación de la industria pesada, hasta entonces centrada en la producción militar.
El establecimiento de la compañía tuvo un impacto positivo en la economía eslovaca, con la creación de nuevos puestos de trabajo, una cadena de suministro integrada, y la introducción de innovaciones tecnológicas en los procesos productivos.
Desde entonces, la filial eslovaca del fabricante de automóviles alemán ha producido más de 5 millones de vehículos, lo que la convierte en el mayor empleador y contribuyente del país. «Los 30 años de Volkswagen Slovakia son una historia de éxito detrás de la cual hay miles de trabajadores», dijo el presidente de la junta, Oliver Grünberg.
La planta de Bratislava produce actualmente cientos de miles de vehículos al año, con nueve modelos de cinco marcas de automóviles. Hasta ahora, la compañía ha invertido un total de 4.600 millones de euros en producción e infraestructura. En 2002 comenzó a fabricar SUV, en 2015 construyó la nueva línea de carrocerías para las marcas Audi y Volkswagen y en 2017 construyó la nueva línea de carrocería y sala de montaje para el modelo Porsche. A finales del año pasado, el fabricante de automóviles reanudó la producción del Volkswagen Passat y pronto también fabricará los modelos Škoda Superb.
Las nuevas inversiones de Volkswagen Slovakia permitirán la creación de 2.000 nuevos puestos de trabajo.
El compromiso de Volkswagen con la sostenibilidad medioambiental
La empresa no solo representa uno de los pilares de la economía eslovaca, por su fuerte contribución a la formación del PIB nacional, sino que también desempeña un papel de liderazgo en la movilidad eléctrica con planes de inversión para la producción de vehículos ecológicos. Aproximadamente el 23% de la producción actual consiste en automóviles híbridos enchufables o totalmente eléctricos.
Precisamente este aspecto fue subrayado por la presidenta Zuzana Čaputová, quien visitó la planta de Bratislava el 31 de mayo, mostrando un gran interés por los temas de sostenibilidad medioambiental, además de la necesidad de salvaguardar puestos de trabajo y realizar proyectos enfocados a mantener la competitividad productiva.
Volkswagen Slovakia ha elaborado planes ambiciosos para lograr objetivos ambientales estratégicos y convertirse en una empresa de cero emisiones para 2050, y esto podría ser un ejemplo a seguir en el sector automotriz, dijo Čaputová.
Grünberg destacó que el logro de la neutralidad de carbono dependerá también en gran medida de la mejora general de las condiciones del país, en particular el respeto a la biodiversidad, la expansión de la red de recarga para autos eléctricos, la difusión del uso de biogás y la recuperación de energía de los residuos.
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Foto: prezident.sk
Volkswagen Slovakia (Fb)
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